La sangre se encarga de conducir el oxígeno a todas las
regiones del cuerpo, incluso a las más alejadas. Sin embargo, la córnea
de los ojos no posee ni un solo vaso sanguíneo, así que toma el oxígeno
directamente del aire.*
Ejercicio para realizar al aire libre:
Cerrar muy lentamente los ojos, intentando que sea un movimiento contínuo, y unir los párpados con delicadeza, sintiendo la fina línea que los separa.
Después, abrir también lentamente pero en toda su capacidad, intentando sentir el contacto del globo ocular con el aire.
Repetir unas 10 veces y después cerrar fuertemente los párpados 2-3 veces, relajar y respirar profundamente.
este blog es una perla...
ResponderEliminarMuchas gracias, Maryam, por tu comentario.
ResponderEliminar¡Que lo disfrutes!
elena